Papá Changó escucha a tu hijo
que acude a ti.
Tú que eres el dueño de mi casa
cuídanos y protégenos.
Papá Changó, aleja de ella todo lo malo,
y tráenos la prosperidad y la abundancia.
Que no carezcamos nunca
de lo que necesitamos,
danos tu protección y tu ayuda.
¡Kaó Kabiesilé, Shango Alufina!
Papá Changó escucha a tu hijo
que acude a ti.
Igual que eres padre bondadoso
de los Ibejis, cuida de mis hijos
y de mi familia.
Que tu poder y tu fuerza
estén siempre con nosotros,
y no nos falte la salud.
¡Kaó Kabiesilé, Shango Alufina!
Papá Changó escucha a tu hijo
que acude a ti.
no entren en mi casa, que es la tuya,
y si nuestros enemigos
las hubieran hecho, por envidias
malos deseos y odios,
llévatelas donde no dañen a nadie
y destrúyelas para que tu casa,
sea un lugar limpio y libre de ataduras.
y destruyelas.
¡Kaó Kabiesilé, Shango Alufina!
Papá Changó escucha a tu hijo
que acude a ti.
Cuida de nosotros, Papá Changó
y que no nos falte lo necesario.
Cuida de tu hijo, Papá Changó
que te es fiel, y trae a la casa
la salud, el amor, la paz y la prosperidad.