Oh Santísima Trinidad:
A tí acudimos para rogarte
que nos envies los ángeles del coro de San Míguel
y que brinden protección a mi familiar
(se dice el nombre)
que parece estar aflijido o atacado por entes malignos.
Te rogamos por tanto que
por la Sangre de Nuestro Señor Jesucristo,
por los dolores y su pasión se aleje de esta persona
todo mal dado o tirado y quede desatado
y absuelto de toda culpa.
Amén