BENDICIÓN DE UNA IMAGEN
Mt. 5, 1-10 o Mt. 5, 13-16.
Salmo 1.
C. Nuestra ayuda está en el Nombre del Señor.
P. Que hizo el cielo y la tierra.
C. El Señor esté con vosotros.
P. y con tu espíritu.
C. Oremos.
Se hace un momento de oración silenciosa.
Dios todopoderoso y eterno,
tú permites esculpir o pintar
las imágenes de tus santos,
a fin de que, al contempladas con nuestros ojos,
meditemos y tratemos de imitar sus obras y sus virtudes.
Por eso, te pedimos que bendigas +
y santifiques esta imagen,
hecha en honor y recuerdo de tu Hijo Unico,
nuestro Señor Jesucristo
(o de la santísima Virgen María, Madre de nuestro Señor Jesucristo, o del Apóstol san …, o de san …, o santa …).
Te rogamos que a quienes procuren,
delante de esta imagen, tributar culto
y honrar a tu Hijo Unico
(o a la santísima Virgen María,
o a este Apóstol, o a este santo o santa),
por sus méritos e intercesión,
les concedas tu gracia en este mundo
y la gloria eterna en la Vida futura.
Por Cristo nuestro Señor.
Amén.
El celebrante hace la aspersión con agua bendita.
Se recita el Padre nuestro.
Si la Imagen es de Jesucristo:
Oh Dios, tú habitas en una luz inaccesible
y nos has amado tanto que, siendo invisible,
te nos has hecho visible en Cristo;
mira con bondad a estos hijos tuyos,
que han dado forma a esta imagen de tu Hijo,
y haz que al venerarla,
se vayan transformando en la realidad
que esta imagen representa.
Por Jesucristo nuestro Señor.
Amén
Si la Imagen es de la Virgen:
Oh Dios, que en la Santísima Virgen
has dado a tu Iglesia una imagen de la gloria futura
a la que esperan llegar tus fieles,
que han elaborado esta imagen de la Santa María,
alcen confiadamente sus ojos hacia ella
que resplandece como modelo de virtudes
para todo el pueblo de tus elegidos.
Por Jesucristo nuestro Señor.
Amén.
Si la Imagen es de los Santos
Oh Dios, fuente de toda gracia y santidad,
míranos con bondad a nosotros tus servidores,
que hemos dispuesto esta imagen de San N........
y haz que experimentemos
la intersección de este santo,
el cual convertido en amigo y coheredero de Cristo, resplandece como testigo de vida evangélica
y como egregio intercesor ante ti.
Por Jesucristo nuestro Señor.
Amen