Arcángel San Miguel,
protector y guardián de los
hombres,
tú que brillas con resplandor,
líbranos de todo mal.
Con plena
confianza recurrimos a tí
para que guardes en unión
y amor a nuestras familias.
Fortalece con tu presencia la unión familiar
y libérala de todo egoísmo y
discordia.
Amén.