Préstame Madre tus pensamientos,
e ilumina mi mente con la luz de tu
sabiduría.
Préstame Madre tus ojos,
Préstame Madre tus ojos,
para con ellos mirar, si con ellos
miro,
nunca volveré a pecar
Préstame Madre tus labios,
Préstame Madre tus labios,
para con ellos
orar,
si con ellos oro Jesús me podrá escuchar.
Préstame Madre tu lengua,
Préstame Madre tu lengua,
para poder comulgar,
pues es tu lengua materna de amor y
santidad.
Préstame Madre tu corazón,
Préstame Madre tu corazón,
para poder perdonar
y cambiar mi
corazón de roca por uno celestial.
Préstame Madre tus manos, para poder trabajar,
Préstame Madre tus manos, para poder trabajar,
si con ellos trabajo, rendirá una y mil veces más.
Préstame Madre tu manto, para esconder mi maldad,
Préstame Madre tu manto, para esconder mi maldad,
pues cubierta con tu manto al cielo he
de llegar.
Préstame Madre a tu Hijo, para poderle yo amar,
Préstame Madre a tu Hijo, para poderle yo amar,
y esa será mi
dicha para toda la eternidad.
Amén.
Amén.